
El futbolista Lamine Yamal celebró su cumpleañoscon espectáculo que cosifica a personas con discapacidad
La fiesta de Lamine Yamal desató una ola de indignación. El joven jugador del Barça fue denunciado por la Asociación de Personas con Acondroplasia tras contratar a personas con enanismo para su cumpleaños. La asociación lo acusa de promover la cosificación y el uso de cuerpos diversos como espectáculo. El caso ya genera debate sobre el uso ético de la imagen y los derechos de las personas con discapacidad.
El futbolista español Lamine Yamal, quien juega en el Barcelona, fue denunciado este domingo por la Asociación de Personas con Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas con Enanismo (ADEE). La denuncia se debe a que, con motivo de su cumpleaños número 18, el futbolista organizó una fiesta temática de “la mafia italiana” y contrató a personas con enanismo como parte del entretenimiento del festejo.
La presidenta de la ADEE, Carolina Puente, señaló: “Cuando una persona con influencia social participa en este tipo de situaciones, el daño es aún mayor, porque se transmite a la sociedad, especialmente a los jóvenes, que la discriminación es aceptable. Debemos erradicar la cosificación de la diferencia y educar en respeto y equidad”.
El futbolista publicó este lunes en sus redes sociales un video en el que se muestra parte de la fiesta de cumpleaños. Entre los invitados estaban Bizarrap, Bad Gyal, Quevedo, Lola Índigo, Nicki Nicole y algunos de sus compañeros de equipo como Lewandowski, Balde y Gavi.
Según la asociación, Yamal contrató a personas con enanismo para participar en actividades de espectáculo. Sin embargo, en España estas prácticas son inaceptables según la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad, que prohíbe textualmente: “Quedan prohibidos los espectáculos o actividades recreativas en que se use a personas con discapacidad o esta circunstancia para suscitar la burla, la mofa o la irrisión del público de modo contrario al respeto debido a la dignidad humana”.
La asociación expresó que no se quedará en silencio y defenderá los derechos y la dignidad de las personas con acondroplasia o displasias esqueléticas. Exige que se asuman responsabilidades para evitar que estos actos se repitan e invita a quienes pertenezcan al colectivo a acercarse para recibir apoyo y construir nuevas oportunidades.
Mientras tanto, Yamal, además de enfrentar la denuncia y posibles acciones legales por parte de la asociación, podría recibir sanciones deportivas por el daño a su imagen pública, sin contar la presión mediática y social que enfrenta actualmente como consecuencia de haberse divertido a costa de personas con discapacidad.