
CEDAW revela brechas entre el discurso y la realidad; organizaciones piden garantizar justicia
En medio de un contexto marcado por desafíos persistentes en materia de igualdad y acceso a la justicia, México fue evaluado en junio de 2025 por el Comité de la CEDAW, el principal mecanismo internacional que supervisa el cumplimiento de los derechos humanos de las mujeres. En esta décima revisión, organizaciones civiles presentaron un informe sombra que documenta con preocupación la brecha entre los avances normativos y la realidad que enfrentan miles de mujeres: feminicidios sin justicia, desapariciones sin respuesta, derechos reproductivos aún limitados y riesgos crecientes para defensoras de derechos humanos. El informe plantea una invitación urgente al Estado mexicano: fortalecer sus acciones, cerrar las brechas institucionales y garantizar una vida libre de violencia y discriminación para todas. Porque más allá del discurso, el verdadero tiempo de mujeres requiere voluntad, recursos y justicia efectiva.
En junio de 2025, México enfrentó su décima evaluación ante el Comité de la Convención para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés), el principal tratado internacional que protege los derechos de las mujeres. Adoptada por México en 1979 y vigente desde 1981. Esta revisión, ocurre cada cuatro años. La CEDAW establece obligaciones jurídicas para los Estados: deben derogar leyes discriminatorias, garantizar igualdad en la vida pública, promover la salud y erradicar la violencia de género.
El Comité, conformado por 23 expertos independientes, examina los informes aportados por el Estado y los llama a rendir cuentas frente a recomendaciones específicas. Esta revisión es clave para medir el avance del país en materia de género y violencia contra las mujeres.
El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) —una red de 43 organizaciones en 22 estados— y la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas, Todos y Todes (Red TDT) presentaron un informe paralelo “informe sombra” que desmonta el discurso oficial y documenta, con cifras duras, el abandono institucional frente a la violencia de género, el feminicidio, la desaparición, la trata de personas, el aborto, el acceso a la justicia y los derechos de defensoras.
Desde el Gobierno Central se repite una y otra vez el eslogan “Tiempo de mujeres” como estandarte de la primera Presidenta en la historia del país. Pero ante los datos del informe, la pregunta se impone: ¿Es tiempo de mujeres?
Feminicidios, desapariciones y cifras que no encajan
Según datos oficiales, 34,715 mujeres y niñas han sido asesinadas entre 2015 y abril de 2025, pero apenas el 24.6% de los casos se investigan como feminicidios. Cada día, en promedio, son asesinadas 10 mujeres en México, en un contexto donde la militarización se impone como política de seguridad sin enfoque de género.
El informe resalta que en estados con Alerta de Violencia de Género como Estado de México, Guerrero y Jalisco, el subregistro es alarmante: solo el 15% de muertes violentas de mujeres en Jalisco, el 11% en Guerrero y el 27% en el Estado de México fueron tipificados como feminicidio en 2024.
En este último, dos mujeres son asesinadas cada día, mientras se acumulan más de 31 mil casos de desapariciones femeninas.
Justicia sin enfoque, refugios insuficientes y aborto criminalizado
El informe sombra presentado denuncia la falta de personal especializado, la revictimización institucional, y el uso de hipótesis como suicidio o accidente para cerrar investigaciones por muertes violentas de mujeres. Además, sólo existen 13 refugios especializados para víctimas de trata en todo el país y 218 carpetas de investigación por aborto fueron iniciadas tan solo en el primer trimestre de 2025, incluyendo entidades donde el procedimiento ya fue despenalizado.
En Guerrero, se documentan casos de niñas indígenas vendidas por sus padres desde los 12 años, en transacciones de hasta $250 mil pesos, sin intervención efectiva de las autoridades. Mientras tanto, 3,354 mujeres han sido hospitalizadas por ataques con ácido en los últimos 12 años, una forma extrema de violencia de género que sigue sin ser prevenida ni castigada.
¿Y las defensoras?
Entre 2018 y 2024, 39 defensoras de derechos humanos fueron asesinadas y 4 están desaparecidas, muchas de ellas indígenas o defensoras del territorio. De las 171 defensoras incorporadas al mecanismo de protección, solo 146 cuentan actualmente con medidas, que se reducen a botones de asistencia y llamadas de emergencia.
Recomendaciones urgentes
El informe cierra con un llamado claro: México no puede seguir fallando a las mujeres. Entre las recomendaciones clave al Estado mexicano destacan:
- Investigar todas las muertes violentas de mujeres bajo la hipótesis de feminicidio.
- Derogar de inmediato los artículos del Código Penal Federal que penalizan el aborto, y garantizar insumos y personal capacitado en todo el sistema de salud.
- Fortalecer fiscalías especializadas en trata, con presupuesto y capacidad para actuar frente al crimen organizado.
- Homologar y evaluar periódicamente la implementación de la AVGM, con indicadores de impacto claros.
- Implementar alertas inmediatas de búsqueda (Protocolo Alba, Alerta Amber) con enfoque diferenciado y de género.
- Reconocer y proteger con enfoque interseccional a las defensoras y periodistas.
Frente a un panorama donde las cifras no cuadran con los discursos oficiales, el informe sombra presentado por la sociedad civil exige más que promesas. Mientras persista la violencia estructural y la impunidad, “Tiempo de mujeres” seguirá siendo sólo una consigna vacía. La evaluación de México ante la CEDAW no solo representa un diagnóstico internacional, sino una oportunidad para transformar el compromiso en acciones concretas. Reconocer las deudas pendientes con las mujeres es el primer paso; cumplir las recomendaciones, el siguiente. Si el país aspira a construir un verdadero “tiempo de mujeres”, debe hacerlo desde la escucha, la reparación y la voluntad política para garantizar vidas libres de violencia, con justicia, dignidad.